Cuilapam de Guerrero es el hogar de un antiguo convento que, a diferencia de los demás, no tiene techo. Este peculiar convento se encuentra en el pequeño pueblo de Cuilapam de Guerrero a unos 30 minutos de la ciudad de Oaxaca. El lugar es fácil de encontrar porque es un gran terreno apacible, en la carretera principal que atraviesa Cuilapam. La iglesia actual es relativamente pequeña, pero la sección del convento y la parte de la capilla sin techo del complejo, son razonablemente grandes. Es posible caminar por los claustros de Cuilapam (si se paga la entrada), y admirar una serie de pinturas al fresco que datan del siglo XVI.
Es de particular interés, la estatua del revolucionario líder de la independencia mexicana: El General Vicente Guerrero, que conmemora el lugar donde fue asesinado a tiros por un pelotón de fusilamiento. Vicente Guerrero estuvo preso en los claustros de Cuilapam durante un tiempo antes de ser ejecutado en el Día de San Valentín en 1831. Hay una pintura al óleo de él en la sala capitular de los claustros.